A principios de mes llegó a Sephora España la marca de maquillaje de Selena Gomez, Rare Beauty. Unas marcas se nos van (Becca y Marc Jacobs Beauty) y otras ocupan ese espacio que dejan vacío.

La filosofía de Rare Beauty es abogar por un estilo luminoso, bastante sencillo y pensado para la rutina diaria. Sí, también habla de ser capaz de expresarte tal y como eres, pero en general para eso está pensado el maquillaje, ¿no?

Bueno, pues de momento, lo que ha llegado es todo bastante práctico, pero poco novedoso. Otras marcas ya lo ofrecen. No obstante, el producto que mejores reseñas tiene de esta marca no puede estar más en línea con las tendencias este verano: tiene varios tipos de coloretes en crema.

Por un lado tiene un tipo de colorete en crema que viene en unos compactos monísimos (un diez al diseño del packaging), los Stay Vulnerable. Son muy apetecibles si lo que te gusta es un look muy sutil, que aporta un poco de efecto mojado a la piel y poca opacidad.

Como me encanta que mi colorete salude a distancia he optado por probar el otro tipo de colorete líquido que tienen, los Soft Pinch.

Como podéis ver, estos vienen en tubitos transparentes con tapa dorada y un aplicador como de gloss gordo para poder usarlo directamente sobre la piel o depositar la cantidad que queremos en una paleta o en el dorso de la mano antes de usar esponja o brocha para difuminar bien el producto en la mejilla.

Hay dos tipos de acabado en estos coloretes: mate y satinado. Ninguno de los dos contiene destellos (algo a agradecer). He comprado uno de cada para ver si hay muchas diferencias.

Los dos que tengo contienen la misma cantidad independientemente del acabado, son 7,5 ml de producto fabricado en Corea. El packaging externo es muy sencillo, blanco y hecho de cartón reciclable.

He elegido dos tonos en la gama de los melocotones-naranja porque es mi tipo de colorete favorito.

• Bliss: Es un tono melocotón claro con acabado mate. Al probarlo en la mano (una capa gruesa) me pareció que iba a quedar muy seco, pero al difuminarlo con una brocha gordita sintética lo cierto es que no queda nada pegote ni seco. Se difumina de lujo y es muy clarito, pero pigmentado, así que lo que deja es un sutil tono en la piel que resulta super favorecedor y que se nota, sin ser cantoso. El acabado mate no da impresión de piel seca para nada, al contrario, se funde tan bien que queda muy natural. Me ha sorprendido y le estoy dando mucho uso para diario. Lo compré por probar la textura mate y es el que me ha gustado más.
• Joy: No es que el acabado satinado o jugoso (dewy) no me guste, es que Bliss es ideal para diario. Joy es más naranja, más pigmentado y se parece bastante al que tengo de Danessa Myricks, por lo que me ha sorprendido menos, pero no por ello es un mal producto. Al contrario, si no tenéis el Visión Flush naranja de Danessa, este es muy parecido e igualmente estupendo.

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Los dos acabados se trabajan muy bien, ofrecen una duración razonable (con mascarilla y aún mejor sin mascarilla) y no marcan en exceso las imperfecciones de la piel. Tengo ya una edad y no me avejentan (como pasa con algunos pigmentos líquidos mate).

Hay 8 tonos en los colores habituales, rosas, coral, un rojo y un malva (ese me llama). Me parecen muy ponibles y que con muy poco basta, así que un botecito de estos dura lo suyo.

Cada uno de estos coloretes cuesta 21,99€ en Sephora España (no es un precio desproporcionado para lo que pueden durar).