Laura Mercier es una maquilladora nacida en Francia pero que alcanzó la fama en Estados Unidos donde ha maquillado a famosas como Sarah Jessica Parker y que, como muchos otros maquilladores, lanzó una línea de productos que hoy por hoy abarca maquillaje, tratamiento, cuidado corporal e incluso fragancias. Su crema hidratante con color y SPF es famosa en medio mundo a pesar de que la marca no se vende en todas partes y sus stands se caracterizan por un aspecto sobrio y elegante y una buena oferta en tonalidades que funcionan con distintos tipos de piel. Por desgracia, es otra de esas marcas interesantes que aún no se vende directamente en España pero que se puede adquirir por internet y en tiendas en Reino Unido y, lógicamente, en muchos centros y en Sephora en Estados Unidos.

En 2015 decidí superar mis reticencias y empecé a usar las sombras en crema en formato stick de By Terry, que me conquistaron, así que en enero cuando entré en COIN en Roma y vi el stand de Laura Mercier fui directa a por las también famosas sombras en crema en stick de esta marca: los Caviar Stick.

Había leído mucho sobre estas sombras, sobre su intensa pigmentación y lo mucho que duran puestas y como ya he probado las de otras marcas quería ponerlas a prueba. Encima el descuento del 10% para turistas extranjeros de COIN servía como motivación adicional.

Hay muchos colores para elegir, con texturas más o menos satinadas e incluso algunos de los más oscuros son mate, pero opté por dos tonos relativamente similares pero que sabía que iba a usar mucho:

 

• Burnished Bronze: Aunque se llame bronce quemado se trata más bien de un cobre rojizo que casi recuerda al color de la madera de caoba. Es un tono intenso, muy pigmentado y satinado (sin brillos o purpurina pero no mate).
• Amethyst: Este es un color más antiguo y de hecho ha sido incluido en algunos de los packs de mini caviar sticks que lanza la marca por navidad algunos años. La web lo describe como malva perlado pero tiende más a ese marrón topo que queda tan bien en un maquillaje de ahumados. También es una sombra satinada (incluso un poco más «frosted» que la otra). Muy pigmentada.

Las dos sombras son muy cremosas, fáciles de aplicar y aún más fáciles de difuminar en el párpado. Si quieres un maquillaje de impacto puedes aplicar más capas y cantidad, si prefieres algo más de diario, basta con un poco en el centro del párpado y delinear a ras de las pestañas y luego difuminar bien o con los dedos (que funcionan de lujo con estas sombras) o con una brocha sintética tupida. Me gusta mucho usar las nuevas brochas de la colección Bold Metals de Real Techniques para las sombras en crema.

 

Las brochas de Real Techniques son de pelo sintético y bastante económicas para lo buenas que son. Para este tipo de sombras son ideales y encima ya podemos comprarlas en tienda física gracias a la cadena Primor y a Beautik.

Me han gustado mucho y en cuanto pueda quiero probar más colores, son sombras perfectas para mi trabajo, dado que en las jornadas intensas salgo de casa a las seis de la mañana, retocar el maquillaje es imposible y no vuelvo hasta las nueve hecha un despojo humano. Una sombra que aguanta digna todas esas horas, sin emborronarse, ni marcar pliegues es lo que busco y si encima puedo maquillarme en 5 minutos y que quede bien, elegante y profesional, pues mejor que mejor.

¿Dónde puedo comprarlas?

Por el momento en tiendas online como Net-A-Porter (no incluyo enlace porque ahora no les quedan), en The Urban Retreat hay una buena selección de colores y en Selfridges. Es una buena compra si tenéis un viaje o una amiga que vaya a viajar a Londres, Roma o Estados Unidos.